#1
Detecta quién es el primero en bajar el precio
Todas las guerras de precio empiezan con un pequeño cambio de precio. Muchos pequeños retailers siguen los cambios de precio de competidores más grandes.
#2
Conoce qué tiendas se han quedado sin stock
Dado que tienes la opción de monitorizar la información de la página web directa de cada uno de los vendedores de tus productos, puedes conocer su disponibilidad para cada producto y realizar propuestas comerciales cuando tus clientes más lo necesitan.
#3
Analiza la composición del catálogo de cada vendedor
Imaginemos el siguiente caso: El vendedor A es un vertical del sector X. El 90% de su catálogo lo componen familias de productos muy similares al tuyo. Por otro lado, el vendedor B es una tienda que vende productos del sector X, Y y Z. Tus productos y los de tus competidores directos representan tan sólo un 6% de su catálogo.
En el caso del vendedor A deberás luchar mucho más por conseguir un buen precio de venta ya que tiene a muchos de tus competidores directos en su catálogo. En el caso del vendedor B, ni tu marca ni la de los competidores representan una cantidad muy significativa de su catálogo. Por esta razón, no es probable que tengas tantas opciones para comparar los precios de tus productos con los de marcas con productos similares.
#4
Determina la relevancia de tu marca
en el catálogo del vendedor
Mediante el módulo de BI (Business Intelligence) y la funcionalidad de Catalog Explorer podrás conocer más acerca de tu posición en el catálogo del vendedor. Podrás visualizar qué porcentaje representa tu marca en su catálogo, y podrás explorar este tipo de información con otras marcas disponibles en el catálogo del vendedor.